Gobernar es anticipar

El pasado domingo, el País Vasco y Galicia celebraron sus elecciones autonómicas, convocadas inicialmente para el 5 de abril y pospuestas por el Estado de alarma. Más allá de las victorias cantadas del PNV y del PP de Feijóo —con su cuarta mayoría absoluta consecutiva— y de las distintas lecturas que se pueden hacer del desplome de Podemos y de la subida de la izquierda nacionalista —con el llamativo caso de Bildu—, parte del interés informativo estuvo en la limitación de voto a los ciudadanos contagiados por coronavirus.

Es cierto que es prioritario garantizar la salud pública, pero no se pueden restringir derechos fundamentales con tanta ligereza y quebrar así las bases de nuestro Estado de derecho. Cuando se fijó una nueva fecha para la doble cita electoral era esperable esta tensión y había que haber planteado alternativas. Al igual que ocurre con otras medidas que se están tomando estos días para hacer frente a los rebrotes, haber llegado a este punto denota una enorme falta de previsión. Y gobernar siempre pasa por manejar la información disponible y anticipar.