Francisco: «Juan Pablo II fue un hombre de oración, de cercanía y de justicia»

En el centenario del nacimiento de san Juan Pablo II, el 18 de mayo de 1920, el Papa Francisco ha presidido este lunes la Misa en la capilla de la basílica de San Pedro donde se encuentra la tumba del Papa Wojtyla. Francisco ha comenzado rezando a «Dios, rico en misericordia» –en referencia a una de las encíclicas más conocidas de su predecesor–, que llamó a san Juan Pablo II «para que guiara a toda la Iglesia, para que nos concediera, fortalecidos por su enseñanza, abrir con confianza nuestros corazones a la gracia salvadora de Cristo, único Redentor del hombre».

El Papa señaló tres rasgos que caracterizaron a Juan Pablo II: la oración, la cercanía al pueblo y el amor por la justicia: «san Juan Pablo II fue un hombre de Dios porque rezaba mucho: hacía mucho tiempo de oración. Sabía que la primera tarea del obispo era rezar». Asimismo, «fue un hombre cercano a la gente y recorrió el mundo buscando a su gente. La cercanía es uno de los rasgos de Dios: Dios está cerca de la gente. Una cercanía que se hace fuerte en Jesús. Un pastor está cerca de la gente, de lo contrario es sólo un administrador. Juan Pablo II nos dio el ejemplo de esta cercanía: a los grandes y a los pequeños, a los cercanos y a los lejanos».

Junto a ello, el Papa Wojtyla fue también «un hombre que quería justicia: justicia social, justicia del pueblo, la justicia que alejas las guerras, y para ello hablaba de la misericordia: porque no hay justicia sin misericordia, van juntas». En este sentido, Juan Pablo II «hizo mucho para que la gente entendiera la Divina Misericordia, especialmente con la devoción a santa Faustina. Oremos para que nos dé a todos la gracia de la oración, de la cercanía y de la justicia que es misericordia, y de la misericordia que es justicia».

Con la celebración de este lunes finaliza la serie de retransmisiones en directo de la Misa del Papa durante el confinamiento, emisiones que se iniciaron el 9 de marzo pasado tras la suspensión de las celebraciones con la participación del pueblo. Con la reanudación en Italia y en otros países de las celebraciones con los fieles, concluye la emisión en directo de la Misa de la mañana desde la Casa Santa Marta. El Papa espera que el Pueblo de Dios pueda volver a la comunidad y a la familiaridad con el Señor en los sacramentos, respetando siempre –como dijo este domingo durante el Regina Coeli– las prescripciones establecidas para la salud de todos.