La Curia Romana dona un mes de su sueldo para las obras de caridad del Papa - Alfa y Omega

La Curia Romana dona un mes de su sueldo para las obras de caridad del Papa

La donación se ha materializado después de que el limosnero pontificio pidiera en una carta donaciones «para la caridad del Papa» y participar así «en el sufrimiento de la gente»

Redacción
Foto: CNS

Los cardenales, obispos y prelados que componen la Curia Romana han ofrecido un mes de su sueldo al Santo Padre para que pueda llevar a cabo más obras de caridad, según ha informado el diario italiano Il Fatto Quotidiano.

La decisión de donar el sueldo tomada por la Curia se ha hecho efectiva después de que el cardenal Konrad Krajewski, limosnero pontificio, pidiera donaciones en una carta para acompañar el sufrimiento de la gente.

«Podemos unirnos de manera especial con nuestro Pontífice, obispo de Roma, que preside la comunión universal de la caridad. Podemos donar para la caridad del Papa y de esta manera participar en el sufrimiento de la gente. El Santo Padre mismo decidirá el destino de nuestras limosnas para esta emergencia sanitaria», escribió en la misiva el limosnero.

Según informó la oficina de prensa del Vaticano, la donación ha sido canalizada a través de la Congregación para las Iglesias Orientales, que ha instituido un fondo de emergencia siguiendo las instrucciones del Papa, tras la solicitud de las nunciaturas apostólicas.

Precisamente, con el dinero recaudado en ese fondo el Vaticano donó recientemente respiradores a varios hospitales de Siria, Jerusalén y Belén, y equipos de diagnóstico a Gaza, para ayudar a la asistencia contra la pandemia del coronavirus.

Solidaridad del Vaticano

El gesto de la Curia no es la primera muestra de solidaridad surgida desde el Vaticano. La propia limosnería pontificia ha mantenido sus servicios a pesar del coronavirus.

Además, el Papa creó recientemente otro fondo de emergencia en las Obras Misionales Pontificias (OMP) para recaudar dinero para ayudar a combatir el COVID-19 en zonas de misión, marcadas por la pobreza. Él mismo inauguró el fondo con una aportación de 750.000 dólares.

Por otro lado, la Administración del Patrimonio de la Sede Apostólica (APSA) decidió reducir a la mitad los alquileres de los edificios en Roma de los que es propietaria. Muchos de ellos están alquilados a comerciantes privados y, actualmente, están atravesando graves dificultades económicas a causa del cierra de sus negocios.

Europa Press / Redacción