Ocho de cada diez casados creen que será para toda la vida
A pesar de que en 2018 en Madrid hubo 13.442 rupturas matrimoniales frente a los 17.250 nuevos matrimonios, ocho de cada diez personas casadas esperan que dure para toda la vida, según la Encuesta de Nupcialidad de la Cátedra Amoris laetitia
Luis y Sara se van a casar el próximo 28 de agosto en Asturias, de donde procede él, a unos 2.300 kilómetros de la Viena natal de ella. Estos dos treintañeros empezaron a salir en 2015, al poco de conocerse en Madrid, y viven juntos desde hace más de dos años. Creen que la decisión que toman ahora va a suponer «seguridad para la relación y para futuros pasos como tener hijos». Aunque no son católicos practicantes, ambos tienen muy presentes a sus padres, que llevan casados 37 y 33 años, respectivamente, y han decidido casarse por la Iglesia para seguir su estela. Como dice su madre, añade Luis, «un matrimonio, para ser un matrimonio de verdad, tiene que ser por la Iglesia».
Este caso refleja bien algunas de las conclusiones de la Encuesta de Nupcialidad de la Cátedra Amoris Laetitia, del Instituto de Universitario de la Familia de la Universidad Pontificia de Comillas y la Fundación Casa de la Familia. El estudio, elaborado a partir de una muestra de 1.550 adultos residentes en la Comunidad de Madrid, detalla que el 73 % de la población tiene pareja y que ocho de cada diez parejas estables informales quiere casarse, con independencia de que convivan o no.
Entre los que todavía no han dado el paso pero les gustaría, el 40,3 % alegan motivos económicos, un porcentaje que sube al 53,8 % entre los menores de 24 años. Como Luis y Sara, muchos encuestados creen que el matrimonio crea un entorno más seguro para los hijos (66,1 %) y supone una entrega mayor en la pareja (47,0 %). En cambio, son pocos los que creen que quita libertad (18,7 %), que no añade nada a la pareja (26,6 %) y que ayuda a la integración social de la pareja (27,6 % afirma que sí integra).
Una vez dado el paso, más de la mitad de las personas casadas opinan que el factor fundamental de consolidación del matrimonio pasa por el compromiso mutuo (54,3 %). Entre los encuestados más jóvenes surge también como elemento clave la madurez personal, mientras que los mayores mencionan más tener hijos y la seguridad económica.
El apoyo de la Iglesia
En 2018 hubo 163.430 bodas en España –17.250 en Madrid– y se rompieron 99.444 matrimonios –en Madrid hubo 12.873 divorcios y 569 separaciones–. Las cifras son las que son. Pero de acuerdo con la Encuesta de Nupcialidad de la Cátedra Amoris Laetitia ocho de cada diez personas casadas están «plenamente» o «bastante» seguras de que su matrimonio es para toda la vida (82,9 %), y casi cinco de cada diez no tienen ninguna duda (44,6 % están del todo seguras). Entre los que están más seguros sobresalen los católicos, aunque el encuestado medio no detecta diferencia entre casarse por la Iglesia o no hacerlo.
A la hora de contraer matrimonio, las personas religiosas dan mucha mayor importancia a razones de religiosidad (ocho veces más), mejora de la relación (el doble), reputación (el doble) y seguridad. Además, reclaman mayor apoyo de la Iglesia para preparar a las futuras parejas en sus matrimonios y ayudarlas en el camino que inician. En este sentido, la mayoría de encuestados creen que la Iglesia debe dar acompañamiento (59,8 %) y valoran el papel que tiene como apoyo en la educación de los hijos (66,4 %) y en las crisis de pareja (64,5 %).