Las claves del Papa Francisco

¿Por qué es interesante la lectura, y estudio, de este libro?

Porque la Exhortación Evangelii gaudium, del Papa Francisco, es el texto programático, la hoja de ruta, de su pontificado; porque este libro, que recoge varios estudios sobre los grandes núcleos temáticos de la Exhortación, ayuda a contextualizar y a clarificar pistas de desarrollo de la Iglesia en salida; porque poner a la Iglesia en estado de misión, o introducirla en la lógica misionera, significa tener en cuenta las rupturas que se han producido en esa lógica; porque la dimensión pastoral de la Evangelii gaudium es clave para entender el magisterio del Papa Francisco; porque «aprender del propio Jesús un estilo evangelizador» es algo más que una fórmula bonita, de reminiscencias evangélicas; porque la Iglesia está obligada a abrir nuevos caminos, que estén acompañados de un ejercicio de inteligencia de la fe, de coherencia caritativa y de alentadora esperanza; porque «concentrase en lo esencial» implica que la «dimensión social de la evangelización» requiere de articulaciones adecuadas en la vida de los «discípulos misioneros»; porque una pastoral misionera, que se centra en los esencial, debe hacer brillar «la belleza del amor salvífico de Dios manifestado en Jesucristo muerto y resucitado»; porque el profesor Gabriel Richi nos ofrece una contextualización adecuada del texto, y de sus destinatarios, que no hay que olvidar para no caer en lecturas reduccionistas o simplificadoras; porque el segundo capítulo que yo hubiera colocado para la publicación del libro es el del sacerdote Antonio Bravo Tisner sobre «la opción por los pobres y su relación con el ser y autocomunicación de Dios en la Historia»; porque Antonio Bravo, desde un profundo conocimiento y experiencia de la teología de los pobres, ofrece una interesante sistematización sobre el Dios de los pobres, la alianza, esperanza de los pobres, y la espiritualidad de los pobres; porque Avelino Revilla, uno de los sacerdotes madrileños con mejor preparación teológica y cultural del momento, nos lega un escrito sobre la tarea evangelizadora de la Iglesia ante los desafíos del mundo actual, en el que sistematiza cuestiones claves del pontificado, al tiempo que apunta algunos temas, como es el del exceso de diagnóstico, que son muy sugerentes; porque Ángel Castaño aborda la cuestión del Kerygma y su significado en la Evangelii gaudium, con un análisis que bien merece el estudio detenido por su capacidad sintetizadora de lo que es el Kerygma y la Parresía en la teología y en la vida cristiana; porque Jaime Ballesteros, profesor de San Dámaso, de la nueva generación de sacerdotes estudiosos de la doctrina social de la Iglesia, trabaja, desde la historia de la doctrina social, los núcleos fundamentales de la Exhortación del Papa; porque el religioso Miguel Ángel Medina ayuda a los sacerdotes con una intervención sobre la homilía, que es una de las claves de este pontificado y un medio para la coherencia pastoral; porque todo lo que contribuya a dar razones del nuevo estilo de este pontificado debe ser recibido y acogido con interés; y porque todo lo que sea hablar del Papa nunca es suficiente.