El amor frívolo - Alfa y Omega

El amor frívolo

Cristina Sánchez Aguilar
Un momento de la obra. Foto: Teatros del Canal

1975. Ingmar Bergman gana el Globo de Oro a Mejor Película Extranjera por Escenas de la vida conyugal, que disecciona el amor de pareja a través de secuencias de la vida de un matrimonio a priori convencional. No es propio de Bergman retratar la normalidad. Por eso, exprime a los dos personajes, marido y mujer, hasta lo más profundo de sus deseos y odios. Vida perfecta, trabajo estable, hijos y domingos en casa de los suegros… Pero un día llega el desencadenante: un hijo buscado, pero solo por una de las partes. Se precipita el torrente de egos en los que cada uno deja de ser por el otro para priorizarse. Y llega el aborto con una facilidad pasmosa. Y la joven amante, y el divorcio… y un largo etcétera de desdichas. La actriz argentina Norma Aleandro (El hijo de la novia) dirige la adaptación teatral que hasta el 20 de octubre lidera la cartelera de los madrileños Teatros del Canal con un gran éxito de crítica y público. No es de extrañar después de ver a Ricardo Darín en una de las mejores interpretaciones que la arriba firmante ha visto durante años de asistencia a las salas de teatro. Pero la gran actuación no nubla el entendimiento. Y el amor frívolo y egoísta es el sabor de boca al salir. Yo, mí, me, conmigo. Si te parece bien, me acompañas. Y si no, adiós. Condenados al fracaso. Gran reflejo de tantos amores del siglo XXI.