«Cristo nos llama a todos» - Alfa y Omega

«Cristo nos llama a todos»

Sentir «la presencia de Jesús entre nosotros es sentir la urgencia de salir y darlo a conocer». Estas palabras del arzobispo de Valencia, monseñor Carlos Osoro, reflejan la llamada que la Iglesia hace insistentemente a los jóvenes. Las recientes iniciativas en esta diócesis, así como en Oviedo y en Sevilla son una muestra de ello

María Martínez López
Marcha de Jóvenes a Covadonga

Los jóvenes de la archidiócesis de Valencia han vivido semanas intensas. El viernes pasado, monseñor Carlos Osoro presidió una nueva edición de la Vigilia mensual de oración con jóvenes. Cientos de ellos llenaron la basílica de la Virgen de los Desamparados, donde se celebra esta Vigilia el primer viernes de cada mes. En sus homilía, monseñor Osoro habló de Pentecostés y subrayó que, con el Espíritu Santo, «somos capaces de mirar a los demás de una forma diferente, no para utilizarlos, sino para verlos como imagen de Dios mismo, a los que tengo que servir». Sentir «la presencia de Jesús entre nosotros -añadió- es sentir la urgencia de salir y darlo a conocer».

Estas Vigilias tienen un claro enfoque misionero. De hecho, desde comienzos de este curso, al final de cada encuentro, el obispo impone la cruz misionera a varios jóvenes, que se comprometen a ser testigos de Dios en sus ambientes. Para ser misioneros -continuó en su homilía del viernes-, «el lenguaje que nos da el Señor, por la fuerza del Espíritu Santo, es el lenguaje del amor», un lenguaje que entienden «todos los hombres». El obispo hacía así un guiño a los 80 jóvenes que, la semana anterior, habían peregrinado a Roma para participar en la canonización de los Papas Juan XXIII y Juan Pablo II.

Estos jóvenes -explica a Alfa y Omega don Óscar Benavent, Delegado de Juventud- fueron peregrinos mendicantes: «Aparte de la ropa, íbamos sin nada; ni dinero, ni móviles. Anunciábamos el Evangelio por las calles, nos mostrábamos amables y ayudábamos a la gente, y a cambio pedíamos alimentos. Queríamos que los jóvenes tuvieran la experiencia de que el Señor está pendiente de ellos y los cuida. De hecho, nos sobraba comida».

Al día siguiente de la Vigilia, 2.000 niños y jóvenes valencianos se reunieron en el Seminario Mayor de Moncada, para la 35ª edición del Festival de la Canción Vocacional. Aprovechando el Festival, se ofrecía a los jóvenes la posibilidad de visitar las instalaciones del Seminario, donde además se habían instalado sendas carpas para la Adoración y para actividades y dinámicas. En su saludo, monseñor Osoro pidió a los jóvenes: «No os cerréis a Cristo. Cristo nos llama a todos de algún modo en esta vida, tenéis que ser valientes de aceptar su llamada».

Vigilia en Valencia. Foto: J. Peiró/AVAN

38 años visitando a la Santina

El primer sábado de mayo también fue un día especial para los jóvenes de la archidiócesis de Oviedo. 600 de ellos participaron en la 38º edición de la Marcha de Jóvenes a Covadonga, encabezada por el arzobispo, monseñor Jesús Sanz. Este año, el lema era Bienaventurados los pobres de espíritu porque de ellos es el reino de los cielos, el mismo de la Jornada Mundial de la Juventud de este año. Los jóvenes se dieron cita por la mañana en la parroquia de Santa María, de Cangas de Onís. Desde allí, después de una oración introductoria, salieron andando hasta el santuario mariano, donde después de comer participaron en diversas actividades. La jornada terminó con la Eucaristía, presidida por monseñor Sanz.

En la homilía, el arzobispo explicó que «hemos subido aquí para reconocer con gratitud que, con María, se nos ha dado la vida cristiana; en María somos nutridos, y María nos protege en nuestro camino». También subrayó que habían hecho este camino «con prisa; no la que surge del nerviosismo, sino la que se explica desde el corazón: esa prisa que movió a María a ir al encuentro de su prima Isabel. Una prisa que significa la urgencia de querer comunicar algo que se nos ha dado». También comparó a muchos jóvenes actuales con los discípulos de Emaús, que caminan «frustrados, deprimidos, indignados», con una «conversación que no abre horizontes, que no llena el corazón de alegría ni pone luz en la mirada». Por eso, pidió a Dios que «dejemos que Jesús camine a nuestro lado».

Misión Joven, en Sevilla

El sábado 17 de mayo, la archidiócesis de Sevilla celebrará su Misión Joven, un encuentro pensado para que los jóvenes puedan vivir y expresar su fe por las calles de la ciudad. El encuentro está abierto a jóvenes de entre 14 y 25 años, y comenzará en la parroquia del Sagrario de la catedral, donde el arzobispo, monseñor Juan José Asenjo, presidirá una celebración de envío. A continuación, comenzará la yincana misionera, bajo el lema ¡Identifícate!, cuyas pruebas estarán relacionadas con las Obras de Misericordia, que hoy se manifiestan a través de la obra social de la Iglesia. Todas las pruebas desembocarán en una fiesta en la Plaza del Salvador. Parte del coste de inscripción de los jóvenes se destinará a un proyecto social de la Iglesia. Más información: pastoraljuvenilsevilla.org