Taizé lanzará un mensaje de confianza a Europa en «un tiempo de incertidumbres» - Alfa y Omega

Taizé lanzará un mensaje de confianza a Europa en «un tiempo de incertidumbres»

Ricardo Benjumea
Foto: Archimadrid/José Luis Bonaño

«La experiencia de la fraternidad, descubrir que el otro es mi hermano» porque «hay un Dios que nos ama» es hoy el mensaje «más importante» que tienen los jóvenes cristianos para Europa. Ese, a juicio del cardenal Osoro, es el anuncio que lanzará la Viejo Continente el Encuentro Europeo de Jóvenes de Taizé de Madrid, «una ciudad que se ha construido con gentes venidas de toda España, ahora ya de todo el mundo».

El arzobispo de Madrid ha presentado este miércoles, 26 de diciembre, en rueda de prensa con el prior de la Comunidad ecuménica de Taizé, el hermano Alois, las principales líneas del encuentro que, del 28 de diciembre al 1 de enero, reunirá a cerca de 15.000 jóvenes de diversas confesiones cristianas. Junto a la celebración de diversos talleres, hay programados momentos de oración en 170 parroquias de la diócesis durante las mañanas, a los que se añade a la oración conjunta en Ifema por las tardes.

El hermano Alois ha destacado la acogida en los hogares madrileños. «Abrir las puertas a jóvenes que no conocen durante cinco días es un gesto de confianza», ha dicho. En tiempos convulsos, especialmente para los jóvenes, que afrontan «mucha incertidumbre ante su futuro, con el paro» o «las rupturas afectivas en su entorno» que les dificultan «planificar su vida a largo plazo», ese mensaje cobra un valor especial.

«La Iglesia –ha asegurado– tiene necesidad de esta confianza para mostrar más profundamente el valor del Evangelio. Y también Europa tiene necesidad de esta confianza entre los pueblos. Vivimos una época complicada en la que muchos problemas solo van a tener solución si trabajamos unidos». Lo que ofrece Taizé a los jóvenes es una búsqueda de la fuente de esa confianza, «que para nosotros es la confianza en Dios», en un tiempo en el que «los jóvenes no quieren seguir simplemente una tradición, quieren encontrar una convicción personal».

Foto: Archimadrid/José Luis Bonaño

Así lo experimentó en sus propias carnes el cardenal Osoro a mediados de los años 60 durante una visita a Taizé que, ha desvelado, fue «clave» en su vida. El arzobispo de Madrid es desde entonces un gran apologeta de estos encuentros que facilitan «un encuentro de tal hondura con nuestro Señor».

Para esto –ha afirmado– hay «dos premisas», que son «el silencio y la escucha», ya que sin ellos «ni nos encontramos con Dios ni nos encontramos con los hermanos». Y así se produce entre las personas «un encuentro que va más allá de nosotros mismos, de lo que somos o pensamos», y que hace vida la oración del padrenuestro que nos enseña a «abrazar al hermano como Dios mismo nos abraza».

«Sin esta experiencia –ha concluido– no es posible construir Europa. Estaremos divididos, cada uno en nuestro sitio, con fronteras, pero no haremos esos puentes que el Señor nos pide hacer a todos nosotros», algo que procede de «saber que el otro es mi hermano, piense lo que piense. Cuando esa fraternidad se logra, el mundo cambia».

Foto: Archimadrid/José Luis Bonaño

Abusos sexuales

Durante el turno de preguntas, el arzobispo de Madrid se ha referido a los escándalos de abusos sexuales que «hay que afrontar con todas las consecuencias que pueda tener, sin miedo a saber lo que pueda existir». Estos abusos –ha añadido– distorsionan la imagen de Dios que presenta la Iglesia, que de ningún modo es «un dios manipulador que mata, porque cuando hay situaciones de abusos, hay muerte».

El hermano Alois, por su parte, ha incidido en que durante el Sínodo de los Obispos «pude sentir verdadera voluntad de [esclarecer] la verdad». Y ha presentado la cuestión como «ligada a otra más profunda que es el abuso de la autoridad en la Iglesia».