17 niños rescatados del aborto serán bautizados en Getafe
El obispo auxiliar de Getafe bautizará este sábado a 17 niños cuyas madres decidieron no abortarlos gracias a los Rescatadores Juan Pablo II. Después de seguir adelante con su embarazo «muchas chicas que vuelven a Dios y recomponen su vida», afirma la presidenta de la asociación
«La mayoría de los que se bautizan este año fueron rescatados en centros acreditados para hacer abortos en el segundo o en el tercer trimestre del embarazo. Y habrían sido más si no fuera por algún problema familiar de última hora», asegura Marta Velarde, presidenta de la asociación Rescatadores Juan Pablo II, ante el bautizo el próximo sábado de 17 niños que estuvieron a punto de ser abortados. La celebración la presidirá el obispo auxiliar de Getafe, José María Avendaño.
Para Velarde, se trata de un acontecimiento «extraordinario, pues «de una cosa horrible como es la posibilidad de un aborto va a salir algo maravilloso como es entrar en la casa de Dios».
Después de doce años y 6.900 bebes rescatados directamente por la asociación, la presidenta de Rescatadores Juan Pablo II asegura haber sido testigo de «muchas chicas que vuelven a Dios y recomponen su vida, algunas de las cuales se bautizan después y hasta se casan por la Iglesia».
Velarde deshace el tópico de un perfil de chica joven con bajos recursos que acude desesperada a los abortorios: «No es así, porque hay de todo. En muchos casos no hay un motivo grave para hacer el aborto, son mujeres que se plantean abortar simplemente porque el novio no las ayuda, o por un problema de depresión. Los motivos no son solo económicos, hay muchas mujeres que lo que más necesitan es una ayuda más personal, un acompañamiento. Ahí la vuelta a Dios es muy importante».
Por este motivo, «estamos hasta ocho meses acompañándolas en su formación en la fe de cara al bautizo de sus hijos. No es algo que nos tomemos a la ligera; nos implicamos también en la catequesis y reforzamos lo que haga la parroquia».
La labor de los Rescatadores Juan Pablo II se realiza en el entorno de los abortorios, «nunca en la puerta», precisa Marta Velarde. De este modo hacen también muchos rescates internacionales, «porque muchas chicas de Europa vienen a España a abortar porque aquí les sale gratis y se puede hacer en la práctica en cualquier momento del embarazo», asegura.
Ante la última controversia suscitada por la reforma del Código Penal que califica como «acoso» su actividad, Velarde atestigua que «en España la ley no es igual para todo el mundo: cuando el personal del abortorio nos ve, llama la Policía y su palabra vale más que la nuestra. La Policía se persona enseguida, nos piden la identificación, hablan con las chicas, que muchas veces nos defienden… Otras veces, por su presencia, se pierde algún rescate, porque las chicas se asustan. Esta persecución que se está produciendo últimamente no la he visto nunca en todos estos años de mi actividad provida».