Las lecciones de un Papa abuelo

Las imágenes de Papas besando a niños alzados en volandas hacia el papamóvil han sido habituales en los últimos pontificados. La novedad con Francisco es que gestos de este tipo los protagonizan también personas ancianas. Bergoglio se presenta incluso como una especie de abuelo para toda la Iglesia. Su magisterio cotidiano, rebosante de sentido común, refleja esa sabiduría que solo se adquiere con la edad, como las enseñanzas de los abuelos a sus nietos. Francisco está convencido de que el futuro de la sociedad pasa por una alianza entre jóvenes y ancianos. No es casual, por ello, que en pleno Sínodo se haya presentado el libro La sabiduría de los años, un proyecto muy personal del Pontífice, que dialoga y pone en valor las experiencias de mayores de todo el mundo. Ese encuentro intergeneracional permite que los mejores sueños de los jóvenes se enraícen en terreno abonado, en un diálogo que, al mismo tiempo, puede salvar a la ancianidad del ostracismo que sufre hoy en buena parte del planeta, y así generar en este mundo hipercompetitivo nuevos espacios de solidaridad, tolerancia y ternura.