Un hombre de 99 años camina más de 9 km cada día para ver a su mujer en el hospital - Alfa y Omega

Un hombre de 99 años camina más de 9 km cada día para ver a su mujer en el hospital

Luther Younger se ha convertido en una celebridad en Rochester, Nueva York, donde los habitantes admiran su rutina

ABC

Un hombre de 99 años de Rochester, Nueva York, ha conmocionado a las redes con su situación, su rutina se ha convertido para muchos en una bonita historia de amor. Luther Younger lleva 55 años casado con su mujer, Waverlee, pero ahora tiene que hacer un mayor esfuerzo a su edad para volver verla: camina cada día más de 9 kilómetros para verla en el hospital.

Su historia es conocida por los vecinos de Rochester, que cada día le ven caminar hacia el mismo destino, el Strong Memorial Hospital de Rochester. No importa si llueve o hace calor. Younger no deja a su esposa sola ni un solo día, como comparte con CBS News.

Nueve años atrás Waverlee fue diagnosticada de un tumor cerebral, los médicos le dijeron que le quedaban cinco años de vida. Desde ese momento, su vida se convirtió en una serie de idas y venidas del hospital. En ocasiones, sus estancias se prolongaban durante meses

Luther se mantenía fuerte y la iba a visitar siempre. En ocasiones optaba por quedarse a dormir en el hospital para acompañarla, a veces teniendo que usar como cama el suelo.

En estas últimas tres semanas su rutina no ha cesado, su esposa se encuentra ingresada con neumonía. Luther confiesa que podría ir en autobús o esperar a que su hija Lutheta pueda llevarle en coche, pero se niega. Porque ello supondría una espera de la que no se ve capaz de aguantar: «Tengo una esposa. No quiero esperar en el autobús. Quiero ir allí para ver a mi esposa», señaló a CBS News.

Para él no es una prueba de fuerza o valor, bien puede recurrir para ello a sus historias como exmarine de la Guerra de Corea. Para Luther se trata de demostrar su amor por Waverlee: «Es una dama hermosa y me trata como se supone que es una persona, me hizo un hombre», explicó. «Es por eso que la amo, porque es dura. Ella no es débil. Es el tipo de mujer que quiero».