«Enseñar bien el Islam favorece la convivencia» - Alfa y Omega

«Enseñar bien el Islam favorece la convivencia»

Después de que el Gobierno haya aprobado los nuevos currículos de la asignatura de Religión islámica, la comunidad musulmana de España empieza a movilizarse para que las familias puedan ejercer su derecho a educar a sus hijos según sus propias convicciones. Además de emprender campañas para que esta materia se oferte allí donde haya demanda, han puesto en marcha iniciativas de formación para que crezca el número de profesores que puedan impartirla. Según las comunidades islámicas españolas, enseñar bien el Islam es la mejor garantía de convivencia

José Antonio Méndez

En España viven cerca de dos millones de personas de religión musulmana, según el más reciente informe demográfico elaborado por la Unión de Comunidades Islámicas de España (UCIDE). De ellos, el 40 % tiene la nacionalidad española, y más de 275.000 son menores en edad escolar. Lo razonable sería que, en virtud de la Ley Orgánica de Libertad Religiosa, del artículo 27.3 de la Constitución y del Convenio de Cooperación que el Estado español firmó en noviembre de 1992 con la Comisión Islámica de España, todos esos menores pudieran ejercer su derecho a cursar la asignatura de Religión musulmana si así lo solicitan sus padres. Sin embargo, la realidad es bien distinta: tal y como lamenta el informe de la UCIDE, «el 90 % del alumnado musulmán carece de clase de Religión», pues, «actualmente, sólo se atiende una demanda básica, en la etapa de Educación Primaria, en las Autonomías de Andalucía, Aragón, Canarias, Ceuta, País Vasco y Melilla, quedando alumnos musulmanes todavía sin clases de Religión por toda España, y un 90 % de profesores de Religión islámica en el desempleo». De hecho, en toda España hay sólo 47 profesores de Religión musulmana contratados por la Administración, según denuncian desde la UCIDE.

Derechos con 20 años de retraso

Ahora, la comunidad islámica en España comienza a ver más cerca la posibilidad de ejercer sus derechos (y los de sus hijos) en las escuelas. Justo 23 años después de la firma del Convenio de Cooperación con el Estado, el Ejecutivo de Rajoy aprobó, el pasado mes de noviembre, los nuevos currículos de la asignatura de Religión islámica para adaptarlos a la estructura de la LOMCE. Y éste ha sido el momento en el que las dos principales entidades musulmanas de nuestro país (la Unión de Comunidades Islámicas de España, UCIDE, y la Federación Española de Entidades Religiosas Islámicas, FEERI) han aprovechado para emprender una campaña de movilizaciones que logre que esta asignatura se oferte en aquellos centros en los que haya demanda.

El primer paso ha sido reclamar a las diferentes Administraciones autonómicas que contraten a más profesores de Religión islámica. Así lo han hecho, por ejemplo, en Navarra, donde cerca de 2.000 alumnos musulmanes no pueden recibir clase de Religión islámica por falta de docentes.

Sin embargo, aunque los Gobiernos pueden facilitar la contratación de profesores, no puede encargarse de formarlos, pues ésa es una competencia exclusiva de las autoridades de una confesión religiosa.

Campaña de formación

Si para los docentes de Religión católica, es competencia de la Conferencia Episcopal, a través de los obispados, la formación, selección y contratación del profesorado, en el caso de la Religión musulmana, esta competencia recae en la Comisión Islámica de España (CIE), que aglutina al 95 % de las asociaciones musulmanas (entre las que destacan la UCIDE y la FEERI, que son mayoritarias). De hecho, la CIE es la entidad que ostenta la interlocución oficial ante el Estado, y la que, desde el pasado mes de marzo y hasta el próximo mes de junio, está llevando a cabo campaña de cursos de formación para profesores de Religión musulmana, que les permita obtener el Diploma de Aptitud Pedagógica Islámica, es decir, la acreditación ante el Estado que los habilita como aptos para enseñar los contenidos del Islam.

Corán, hadiz, derecho y psicología

Como explican desde la CIE, «la finalidad última de la enseñanza de Religión islámica es proporcionar, junto al resto de áreas, a los alumnos y alumnas, el integral y pleno desarrollo de todas sus capacidades». Por eso, «tiene como objetivo primero que se les facilite el ejercicio de una ciudadanía participativa, válida y crítica», que favorezca «la convivencia democrática». De ahí que la formación que están recibiendo los futuros profesores abarque no sólo exégesis coránica, teología islámica, ciencias del hadiz (los hechos y dichos referidos a Mahoma) y jurisprudencia islámica; sino también patrimonio cultural islámico en España, el marco jurídico español, psicología general infantojuvenil, didáctica de la enseñanza religiosa islámica, y el diálogo interreligioso visto como «una necesidad de las diversas culturas que viven la globalización». En resumen: una buena enseñanza religiosa para favorecer la convivencia.