¿Peor que con Zapatero? - Alfa y Omega

¿Peor que con Zapatero?

Con la LOE del Gobierno Zapatero, la asignatura de Religión tenía, en algunos aspectos, mejor trato que con la LOMCE del PP. Así lo reconoció, al concluir la reunión de la Comisión Permanente de la CEE, celebrada los días 25 y 26 de junio en Madrid, el Secretario General del episcopado español. Don José María Gil Tamayo reveló que, dos días antes, el Presidente, monseñor Ricardo Blázquez, trasladó esa preocupación a don Mariano Rajoy

Ricardo Benjumea

Los obispos aplaudieron, en su día, los avances en el tratamiento a la asignatura de Religión en la nueva ley educativa. Tras 20 años, la materia volvía a ser evaluable en España y a contar con una alternativa, conforme a lo suscrito en los Acuerdos con la Santa Sede. Pero los Acuerdos contemplan también que la Religión sea de oferta obligatoria en los centros en todos los tramos de enseñanza escolar (y de elección voluntaria para padres y alumnos), algo que, con la LOMCE, no sucede en Infantil ni en Bachillerato. A los obispos les preocupa especialmente esto segundo. En Bachillerato, la Religión será una de las 13 asignaturas optativas que las Comunidades Autónomas ofertarán al alumnado, y de las cuales, los centros podrán dar a elegir entre tres y cinco. Es decir, en muchos centros la Religión puede ni siquiera ser ofertada.

Durante la tramitación parlamentaria de la ley, la Conferencia Episcopal intentó, en vano, que se corrigieran esos problemas. No sólo no ha sido así, sino que, con los Reglamentos que desarrollan la LOMCE, la situación ha empeorado notablemente, especialmente en la etapa de Primaria.

Sólo 45 minutos en Primaria

«Los obispos han mostrado su preocupación por cómo se ha concretado, por parte del Gobierno central y de las Comunidades Autónomas, el desarrollo normativo de la nueva Ley de Educación (LOMCE), donde, de hecho, se deja abierta la puerta al incumplimiento tanto del derecho de los padres a educar a sus hijos según sus convicciones, como de lo establecido en los Acuerdos Iglesia-Estado en lo que a la enseñanza de la Religión católica se refiere», se lee en la Nota final de la reunión de la Comisión Permanente de la Conferencia Episcopal.

«En algunas Comunidades Autónomas -constatan los obispos-, la asignatura queda, en enseñanza Primaria, con tan sólo 45 minutos semanales asignados. Se trata de un tiempo totalmente insuficiente para proporcionar una mínima educación de calidad, que supone, además, una reducción del 50 % del tiempo del que se dispone en la actualidad con la LOE». En Andalucía -resaltó el Secretario General de la CEE, don José María Gil Tamayo-, «los obispos han pedido al Gobierno autonómico que las cosas se queden como están». Similar demanda han dirigido a su Gobierno autonómico -del PP- los obispos gallegos. Los obispos de la Provincia Eclesiástica de Santiago pidieron, el pasado jueves, a la Xunta «el mantenimiento del actual horario de la asignatura de Religión.

No estamos ante una rebelión de algunas Autonomías contra el Ministerio. En Ceuta y Melilla, donde el Gobierno mantiene las competencias en educación, el horario de Religión ha quedado también reducido a la mitad.

Petición a Mariano Rajoy

En Andalucía y en Galicia, los obispos han animado a profesores, padres y a los fieles en general a movilizarse en apoyo de las reivindicaciones de la Iglesia por medio de los cauces democráticos. Para la CEE, es fundamental que la opinión pública comprenda que ésta es una batalla en defensa de un derecho fundamental. «Hay que recordar -afirma la Nota de la Permanente- que el problema afecta a todas las confesiones religiosas. No se trata de ninguna reivindicación de privilegios por parte de la Iglesia católica, sino, ante todo, de garantizar el derecho constitucional de los padres a educar a sus hijos según sus propias convicciones».

La Comisión Permanente advierte de que «esta situación de discriminación grave provocará despidos de profesores de Religión, con la consiguiente alarma en las familias». Reducido a la mitad el horario lectivo en varias Comunidades Autónomas, admitió Gil Tamayo, las diócesis se verán obligadas a prescindir de profesores.

El arzobispo de Valladolid y Presidente de la Conferencia Episcopal, monseñor Ricardo Blázquez, trasladó estas preocupaciones al Presidente del Gobierno, don Mariano Rajoy, durante la reunión de 45 minutos que mantuvieron, el miércoles de la semana pasada, en el Palacio de la Moncloa. Además de diálogo con el Gobierno central, hay cauces de diálogo abierto entre las diversas diócesis y las Comunidades Autónomas, según contó, el viernes, el portavoz de los obispos, que mostró su extrañeza por el hecho de que Gobiernos regionales controlados por el mismo partido del Gobierno central mantengan notables diferencias de trato con respecto a la Religión. La primera petición de los obispos, en todo caso, va dirigida al Gobierno central, para que, mediante un Decreto Ley, haga que la asignatura reciba un trato homogéneo en todo el territorio nacional y, sobre todo, garantice el cumplimiento de lo pactado en los Acuerdos con la Santa Sede, tratado internacional con rango de Ley Orgánica. Desde el Ministerio de Educación, se descartó, el mismo viernes, que estas peticiones vayan a ser atendidas, según informó la agencia Europa Press.

Agradecimiento a las familias

Al tiempo que constatan todos estos problemas, los obispos no dejan de agradecer que, «a pesar de las dificultades con las que se viene encontrando, y que no parece que se vayan a resolver del todo con la nueva Ley, dos de cada tres alumnos eligen libre y voluntariamente cada año cursar Religión católica. Los obispos agradecen a las familias, a los padres y a los alumnos su interés, y animan a seguir inscribiéndose en la asignatura, tan decisiva para una educación integral y fundamento de virtudes y de valores».