Arrastraba la carga de haber sido maltratado. Cambió al conocer a gente feliz y agradecida - Alfa y Omega

Arrastraba la carga de haber sido maltratado. Cambió al conocer a gente feliz y agradecida

Redacción

Cuando José Luis tenía seis años y su hermano cinco, un matrimonio los adoptó. Venían de una familia donde sufrían maltrato. Este bagaje había convertido a José Luis, según sus propias palabras, en un cabroncete que hacía la vida imposible a sus profesores, hasta que a los 11 años lo expulsaron del colegio. Fue el comienzo de un vuelco en su vida. En el colegio nuevo, descubrió una nueva forma de mirar a la realidad: «Eran felices por todo, y esto me daba envidia. Yo he cambiado por envidia». Esa experiencia le ayudó a dejar de pensar que «todo lo que me había pasado era malo. Empecé a ver la vida como un regalo». Ahora, es un joven de 20 años convencido de que «cada día se me da un regalo nuevo», y que disfruta mucho con los niños, encantado de darles «lo que a mí se me negó». José Luis es el protagonista de Contra todo pronóstico, el segundo vídeo de la campaña Tsunamis de vida, puesta en marcha por un grupo de universitarios que quieren, a través de vídeos cortos, ayudar a reflexionar sobre el valor de cada vida, a pesar de las circunstancias: