El Papa ha pedido que los diagnósticos de detección precoz del cáncer no estén basados en «intereses comerciales» y que puedan llegar «para todos, gracias a la colaboración entre los servicios públicos y privados, las iniciativas de la sociedad civil y las caritativas». Francisco ha hecho estas declaraciones durante un encuentro con los miembros de la Liga Italiana para la Lucha contra los Tumores.
El Santo Padre también ha pedido difundir «una cultura de la vida, hecha de actitudes, de comportamientos; una verdadera cultura popular, seria» y «accesible a todos».
Para ello, el Pontífice ha dicho que las familias deben ser acompañadas en la fase de la prevención a través de una especie de «pacto solidario» que involucre a las diversas generaciones en «el fatigoso recorrido de la patología oncológica».
Asimismo, el Papa ha asegurado que este «estilo de vida» es una fuente de «voluntariado», al que a definido como «una expresión emblemática de esa gratuidad que debería incidir cada vez más en el vivir cotidiano».
Juntos sin miedo
En esta ocasión, Bergoglio también ha instado de nuevo a los católicos a ir a las periferias, donde «cada hombre y mujer vive en condiciones de marginación» y se encuentran «al margen de la sociedad y de las relaciones». «La salud constituye un bien primario y fundamental de toda persona».
Finalmente, ha expresado su deseo de que sociedad civil y eclesial caminen juntos sin tener miedo «a la proximidad, a la ternura» para concebir espacios sociales que «ofrezcan y acojan ayuda y consuelo recíproco» de manera «auténtica» y no solo «formal».
Agencias / J. C. de A.