La Iglesia también rechaza la Constituyente de Maduro - Alfa y Omega

La Iglesia también rechaza la Constituyente de Maduro

Acusa al chavismo de querer imponer un «sistema totalitario y militarista»

ABC
Nueva protesta en Caracas contra la Constituyente promovida por Maduro. Foto: EFE

El presidente Nicolás Maduro y el ministro de Educación, Elías Jaua, han hecho reiterados llamamientos a la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV) para que se incorporen a la mesa de la Constituyente con la que el chavismo quiere eliminar al Parlamento. Pero los obispos rechazan la convocatoria y exhortan a los venezolanos a «levantar su voz» en contra del proyecto ilegal.

Maduro designó a Jaua como presidente de la comisión que estudia reformar la actual Constitución, lo que ha provocado un rechazo general por parte de la población, que desde hace cinco semanas está tomando parte en una oleada de protestas antigubernamentales que han dejado ya al menos 38 muertos, víctimas de la fuerte represión de los cuerpos de seguridad. Jaua desea presentar a los obispos los detalles de la constituyente comunal, pero se ha enfrentado con un muro infranqueable.

El presidente de la CEV, Diego Padrón, emitió un comunicado suscrito por todos los obispos en el que subrayan su repudio a los planes del régimen de Maduro de cambiar a su antojo la Carta Magna de manera inconstitucional, ante el peligro de desintegración de la República. «Rechazamos la convocatoria de esa Asamblea Constituyente, y exhortamos a la población a no resignarse, a levantar su voz», afirman en un comunicado, en el que añaden que el Gobierno debe cumplir la actual Constitución y no adulterarla.

La CEV dijo que tras la «desacertada» decisión del Tribunal Supremo de anular las competencias de la Asamblea, que encendió las protestas, la constituyente de Maduro es percibida como «divorciada de las urgentes necesidades del país y como un paso más en el socavamiento del Estado Social de Derecho».

La Iglesia considera que lo que necesita el pueblo venezolano es «comida, medicamentos, libertad, seguridad personal y jurídica y paz». Todo ello se conseguiría si el Gobierno actuara de acuerdo con el texto constitucional vigente y con mayor sensibilidad ante tantas carencias. La constituyente de Maduro «no apunta a resolver los graves problemas que aquejan a los venezolanos, sino a prolongar la permanencia de su Gobierno en el poder».

La propuesta de Maduro busca imponer el «Plan de la Patria», traducción operativa del viejo Socialismo del siglo XXI, «sistema totalitario, militarista, policial, violento y represor, que ha originado los males que hoy padece nuestro país», señalan.

La oposición teme que la convocatoria de una nueva Asamblea manejada por el chavismo entre sus bases más fieles aboque al país a un régimen monocolor y excluyente. Es un nuevo intento en el afán de sustituir al actual Parlamento, que fue elegido en las pasadas elecciones por abrumadora mayoría. Además, esta iniciativa presidencial es engañosa, al dejar en la penumbra muchos aspectos de su diseño y aplicación, y daría amplio margen a interpretaciones ambiguas de su reglamento.

Los obispos no olvidan ni ponen de lado «la tristeza y el sufrimiento que este régimen está provocando a nuestro pueblo». Además, en el último mes «ha hecho alarde de su naturaleza represiva mediante la sofocación de la legítima protesta con excesiva e inhumana violencia, generada por los organismos de seguridad del Estado, particularmente de la Guardia Nacional Bolivariana».

Ludmila Vinogradoff / ABC