Un musulmán llora porque los radicales han secuestrado su religión - Alfa y Omega

Un musulmán llora porque los radicales han secuestrado su religión

Un joven pakistaní publica una carta en su perfil de Facebook, donde explica el Islam que le enseñaron sus padres, y pide a musulmanes y no musulmanes mantener la calma y no juzgar a todos por los actos de unos pocos

José Calderero de Aldecoa

Miles de musulmanes han protestado en el mundo entero contra una película que insulta su fe. La publicación del vídeo provocó graves disturbios. Grupos radicales llegaron a matar al embajador estadounidense en Libia y a varios funcionarios. Esta ola de violencia también fue la causante de la muerte de 15 personas en Pakistán, durante las protestas que tuvieron lugar el pasado día 21 de septiembre. En varios países de África y Asia, se han producido episodios de violencia contra los cristianos locales.

Syed Muzamil Hasan Zaidi es un joven musulmán de Islamabad que rechaza la violencia, que no se resigna a que ésta situación y éstas imágenes se conviertan en habituales. Por eso, en su página de Facebook publicó una carta donde pedía a los musulmanes conservar la calma, y a los no musulmanes que no juzguen su religión por unos radicales:

«Lloro porque individuos equivocados y extremistas han secuestrado mi religión. Lloro porque el discurso de odio ha sido catalogado como la libertad de expresión y nadie entiende por qué me duele. No lloro porque no hay esperanza, sino porque todos a mi alrededor no lo ven. Lloro porque lo que usted y yo vimos en la televisión hoy en día, no es mi religión, no es incluso remotamente nada cercano a mi religión. Y sin embargo, todo el mundo hace y decide utilizarla para definir mi religión.

Yo soy un musulmán practicante, pertenezco a una familia de sangre pura de los descendientes directos del Santo Profeta.

• Toda mi vida me han enseñado que mi religión es la de la paz, el amor y el perdón.

• Me han enseñado a amar a todos y cada uno de las creaciones de Dios, independientemente de su elenco, color, credo y religión y nunca deseo mal a nadie, porque no me corresponde a mí decidir quién es bueno y malo.

• Me han enseñado a perdonar y olvidar cuando alguien decide hacerme daño porque eso es lo que mi profeta (paz sea con él) siempre lo hacía.

• Me han enseñado que la mejor respuesta a los que odian es orar por ellos, y ser amable con ellos, y que es lo más eficaz también.

• Me han enseñado que ante las adversidades, nunca hay que perder la paciencia ni los sentidos y que tomar la vida de alguien / hacerles daño en cualquier forma o destrucción de la propiedad pública / privada está prohibido en mi religión.

Y por último, me han enseñado que no vamos a ser juzgados por lo que parece que hemos hecho / logrado, sino por lo que está en nuestros corazones, porque sólo Dios sabe lo que es mejor para nosotros.

Para mis amigos musulmanes, por favor, mantengan la calma.

Para mis amigos no musulmanes, por favor no juzgar a todos por lo que se ve en las noticias, la mayoría de nosotros somos muy muy diferentes en la realidad.

Y por último, esto es lo que mi Libro Sagrado dice con respecto al odio: Y la gente de la Rehman (Allah) son los que van por la tierra humildemente y que, cuando los ignorantes les suplican, ellos les responden: ¡Paz! (Corán, 25/63)».