«Un problema gravísimo, y el Gobierno mira a otro lado» - Alfa y Omega

«Un problema gravísimo, y el Gobierno mira a otro lado»

En 2013, uno de cada cinco embarazos acabó en aborto. «Tener más de 100.000 abortos al año es un problema gravísimo en el que el Gobierno mira para otro lado. Es algo a lo que no podemos acostumbrarnos», denuncia el Foro Español de la Familia. RedMadre asegura, además, que muchas de esas muertes se podrían haber evitado con apoyo real

María Martínez López
Cuando a una mujer se la ayuda, continúa con el embarazo.

108.690 muertes. Muertes de niños no nacidos, perpetradas en 2013, al amparo de la ley Aído, que el PP ha renunciado a derogar. Las estadísticas del aborto —hechas públicas, igual que hacía el PSOE, con un año de retraso, y camufladas en las fechas navideñas— demuestran que el aborto sigue siendo una lacra «de primera magnitud. Tener más de 100.000 abortos al año es, más allá de las pequeñas fluctuaciones anuales, un problema gravísimo en el que el Gobierno mira para otro lado. Es algo a lo que no podemos acostumbrarnos». Y, sin reforma de la ley del aborto ni aprobación de una ley de ayuda a la maternidad, «no hay ninguna política pública para ponerle coto. Las autoridades miden el aborto cada año, y luego se olvidan», lamenta don Benigno Blanco, Presidente del Foro Español de la Familia.

En 2013, abortaron en España 11,74 mujeres por cada mil en edad fértil (entre 15 y 44 años), un 2,25 % menos que en 2012, pero todavía un 31,32 % más que en 2004. Permanece estable el número de embarazos que acaban en aborto: 20,35 %. Doña Amaya Azcona, Directora General de la Fundación RedMadre, subraya que «siguen sin resolverse las cuestiones que hacen que las mujeres se vean abocadas a abortar: económicas, laborales –las mujeres con empleos precarios son amenazadas para que no se queden embarazadas o aborten– y emocionales –muchas son presionadas por su pareja o su familia–. Las mujeres con las que hablamos se plantean abortar por estos motivos, y eso no lo recogen las estadísticas».

La radiografía del aborto en España presenta a españolas (71,59 %, frente al 57,21 % de 2009, debido sobre todo al regreso de inmigrantes a sus países), con hijos (el 54,92 %), que viven en pareja (48,28 %) o con sus padres (24,48 %), y trabajan por cuenta ajena (45,8 %) o no trabajan (28,09 %). Las tasas de aborto más altas están entre los 20 y los 29 años. Sin embargo, mientras estas tasas se reducen, a partir de los 30 años siguen creciendo de forma bastante significativa, entre un 45 % y un 56 % respecto a las de 2004, lo que habla de una consolidación del aborto.

Los datos se aproximan bastante al perfil mujeres atendidas por RedMadre en el mismo año. En su caso, al recibir atención y ayuda, el 89 % no abortó. Esto demuestra que, «cuando a una mujer se la ayuda, continúa con el embarazo», opina Azcona. Por eso, cree que un porcentaje importante de las 108.000 muertes de 2013 se habrían evitado si la Administración ofreciera apoyo real a la maternidad. No lo hay a nivel nacional, pues la ley que prometió el PP en su programa electoral ni está ni se la espera. Tampoco a nivel autonómico, pues muchas de las leyes autonómicas, aprobadas mediante iniciativas legislativas populares, han quedado en papel mojado, denuncia RedMadre.

El simple debate evita abortos

Quizá el dato más novedoso de 2013 sea el aumento de los abortos en centros públicos. Siguen siendo sólo un 8,96 %, pero supone un aumento importante frente al 2,03 % de 2009, antes de que entrara en vigor la que ya algunos llaman ley Aído-Rajoy. Según Blanco, en este aumento pueden influir dos causas: la financiación estatal del aborto y la llegada de «generaciones de médicos jóvenes que se abren a esta cultura del aborto», frente a sus antecesores, que en su mayoría objetaban.

20,35 % de los embarazos acabaron en aborto en 2013

89,93 % de los abortos —97.745 muertes— fueron a petición de la madre

24,94 % de las mujeres que abortaron en 2013 ya lo había hecho otra vez antes, y un 12,31 % dos o más veces

Por otro lado, el Presidente del Foro Español de la Familia considera significativo que «los años en los que ha bajado» la tasa de abortos —2009, 2012 y 2013— «son años en los que se ha estado debatiendo sobre esta cuestión. Cuando se habla públicamente de esto, se genera reflexión y se evitan abortos. Esto supone una llamada a la responsabilidad: hay que lograr por todos los medios que este tema no desaparezca» del debate social. Por eso, cree que la manifestación unitaria convocada para el 14 de marzo y que ya están empezando a organizar «será una gran oportunidad. Queremos apelar a la conciencia colectiva para que no olvidemos el drama de los niños que no nacen. Todos los que defienden la vida tienen que estar ahí». Será la segunda manifestación en pocos meses, después de la masiva del 22 de noviembre pasado. Tras el éxito de ésta, los convocantes pidieron por escrito al Gobierno que explicara por qué había retirado el anteproyecto de reforma. «Aún no hemos recibido respuesta, y supongo que no la recibiremos, como es costumbre», reconoce Blanco. Por ello, están valorando la posibilidad de presentar un recurso contencioso-administrativo.