«No somos de Pablo, o de Apolo: somos de Cristo»
La Acción Católica General de Madrid se reúne, este sábado día 28, en torno al arzobispo, monseñor Carlos Osoro, para celebrar «nuestra disponibilidad al servicio de la Iglesia»
En dos días, las tres ramas de la Acción Católica General de Madrid (niños, jóvenes y adultos) se reunirán para celebrar el Día del militante y del juvenil. Cada delegación de Acción Católica celebra esta jornada en una fecha diferente. Suelen hacerlo en torno a Pentecostés. La de Madrid lo hace este sábado 28 de febrero, y lo hace «con un día de fiesta. Es un día muy importante para nosotros. Nos reunimos todos en torno a nuestro pastor», explica José Ramón García, Presidente diocesano de la Acción Católica General de Madrid. «Es el día del año en el que convergen nuestros caminos y se hace visible la unidad», añade Alejandro Chico, responsable de juveniles.
Este año, monseñor Osoro, arzobispo de Madrid, entregará los carnets a los nuevos juveniles, algo que los chavales esperan con ganas. «Están emocionados», cuenta Alejandro.
Acto central, la Eucaristía
A las 10:30 horas, el Colegio de las Madres Concepcionistas abrirá sus puertas para acoger a los niños y juveniles, que comenzarán encomendando el día en la capilla. A los adultos se les acogerá a partir de las 12:30 horas. Todos juntos tendrán, como primer acto, la celebración de la Eucaristía. «La Misa con el arzobispo es el acto central. Lo más importante de nuestro día. Va a ser la mejor forma de celebrar este día», asegura José Ramón.
Después de la Misa, comerán todos juntos. Tras el postre, el arzobispo recibirá a las distintas ramas, empezando por los niños. Hay previsto también un rato de formación, dedicado a la Espiritualidad de santa Teresa para el seglar en el Año Teresiano. Los juveniles también se formarán en la espiritualidad de la Doctora de Ávila, pero lo harán con una yincana. El día terminará con unas palabras del Presidente de la Acción Católica de Madrid y con el rezo de las Vísperas.
Vamos adonde nos llaman
La Acción Católica llegó a España en 1931. Hoy, en Madrid, cuenta con unos 300 miembros. Todos ellos celebrarán el sábado «nuestra disponibilidad» al servicio de la Iglesia. «Nosotros no somos de Pablo, o de Apolo: somos de Cristo», explica José Ramón, parafraseando a san Pablo. En la diócesis, la Acción Católica trabaja en 67 parroquias (en 24 se atiende a jóvenes y niños, en 13 hay labor con adultos jóvenes, y en 30 parroquias más se trabaja con adultos senior). «Vamos adonde nos llaman: en una parroquia necesitan catequistas, allá vamos; en otra, actividades, también acudimos», explica Chico. «Estamos abiertos a todos. Queremos servir de nexo de unión allí donde estemos trabajando», añade José Ramón.
Y esta unidad, que se hace más patente en la Acción Católica, es la que don Carlos quiere. En los 4 meses que lleva en Madrid, no se ha cansado de pedirla y lo ha hecho en la parroquias y con los movimientos. «Me recordáis aquello para lo que el Señor me ha enviado aquí», les dijo el arzobispo a los jóvenes madrileños congregados en la catedral de la Almudena, con motivo de la Vigilia de oración del mes de febrero. Los jóvenes acudieron a la cita «de parroquias y movimientos distintos», pero «somos de Cristo todos. […] La referencia para todos es Jesucristo, no es el grupo nuestro».