Francia: dos años de cárcel por dar información sobre el aborto distinta a la del Gobierno
Ha recibido el visto bueno definitivo del Parlamento una ley que busca silenciar las páginas web que presenten información negativa sobre el aborto, como los testimonios de las mujeres que sufren consecuencias físicas o psicológicas
Los diputados franceses aprobaron el jueves de forma definitiva la ley que prohíbe las páginas de Internet que ofrezcan informaciones falsas sobre el aborto, muy criticada por la oposición, los movimientos provida y la Iglesia católica.
La nueva ley extiende el delito de obstaculización al aborto a las webs que ofrezcan información sobre el mismo supuestamente parcial o errónea. Quien lo haga, se enfrenta a una pena de hasta dos años de cárcel y 30.000 euros de multa. De esta forma, esas páginas tendrán un tratamiento similar al que en 1993 se pensó para prohibir la presencia ante las clínicas abortistas de grupos para impedir el acceso a las mujeres.
En el punto de mira de los socialistas, impulsores de la ley, están una serie de páginas de Internet pertenecientes a asociaciones provida que ofrecen información sobre el aborto para intentar convencer a las mujeres de que no lo practiquen.
La ministra de la Familia y del Derecho de las Mujeres, Laurence Rossignol, acusó a esas webs de ofrecer «informaciones falsas» para introducir a las mujeres «en una especie de túnel que les lleva a dudar de su decisión» de interrumpir su embarazo.
El Gobierno «define la verdad»
Sin embargo, las asociaciones provida denuncian que esta ley puede afectar a «cualquier información susceptible de contradecir el contenido de la página web del propio Gobierno sobre el aborto —escribe en un comunicado la asociación Choisir la vie—. La «verdad» sobre el aborto se define y está autorizada solo en los medios del Gobierno. Estamos siendo testigos de un totalitarismo del pensamiento, una ataque a la libertad de expresión y de opinión».
Un ejemplo de este silenciamiento es la más popular de esas páginas, «ivg.net», que asegura que el aborto «implica riesgos médicos y psicológicos». Esta posibilidad está recogida en numerosos estudios científicos, y se incluye en la información oficial que se entrega a la mujer para abortar, por ejemplo, en algunos estados de Estados Unidos.
La página web también recaba testimonios de mujeres contra esa práctica. Silenciándolos en nombre de «la libertad de la mujer», en realidad «se las amordaza, prohibiéndoles dar testimonio del sufrimiento físico y psicológico que sufren después de un aborto, la realidad del aborto que ellas han vivido. ¡Este sufrimiento está prohibido y negado por nuestro Gobierno!», critica Choisir la vie. Otras páginas similares muestran imágenes de fetos abortados.
Una cadena de medidas
La Iglesia católica, a través de la Conferencia Episcopal, también se opuso a la ley que, a su juicio, constituye «un precedente grave de limitación de la libertad de expresión en Internet» y «un atentado muy grave a los principios democráticos».
Desde la llegada de los socialistas al poder en 2012 ha habido varias reformas, la primera para eliminar la noción de «angustia», que era necesaria para que una mujer pudiera acogerse al aborto en determinados casos. Posteriormente, se suprimió el periodo obligatorio de reflexión al que estaban obligadas las mujeres entre el momento en el que hacían la petición y la intervención propiamente dicha, y se garantizó el reembolso por parte de la Seguridad Social de la totalidad de los gastos derivados del aborto. También —recuerda el comunicado de Choisir la vie— «se introdujeron en los centros de salud cuotas de abortos» que hay que cubrir.
Efe / Redacción