Michel Remery: «Hay que dar a conocer a Jesús antes de hablar de mandamientos»
El holandés Michel Remery es el autor de proyecto de evangelización Tweeting with God, que comenzó cuando los jóvenes de su parroquia le acribillaban a preguntas tras la Misa del domingo. Cerca de 1.000 preguntas después y tras numerosas reuniones con ellos para tratar todas esas cuestiones, nacieron un libro, un sitio web, una aplicación y varios vídeos, con los que ahondan en la fe jóvenes de todo el mundo. La versión en español del libro, Tuiteando con Dios (San Pablo), será presentada este miércoles por el obispo de San Sebastián, monseñor Munilla
Hoy parece que la apologética está pasada de moda pero usted insiste en que se puede —y se debe— seguir dando razones de nuestra fe…
El objetivo es ayudar a las personas a reconocer la lógica de la fe católica. Para descubrir esto, es indispensable que los creyentes piensen por ellos mismos. Algunas personas simplemente repiten con cierta obstinación lo que han oído, sin ser capaces de dar una explicación de lo que creen. Otros argumentan su visión, pero sus argumentos están infundados. Eso no es un problema, sin embargo es necesario aprender a pensar por sí mismo a medida que pasa el tiempo. ¡Nadie tiene una respuesta preparada para todo! Es importante tanto el estudio como el diálogo sobre cada tema.
¿Cuáles cree que son los interrogantes más comunes de los jóvenes de hoy?
Según mi experiencia, las cuestiones que se están planteando los jóvenes en los Países Bajos son las mismas que se hacen los jóvenes de todo el mundo. La mayoría de estas preguntas relacionadas con la fe planteadas por la gente de hoy están conectadas a las preguntas primordiales: ¿De dónde vengo? ¿Hay un propósito para mi vida? ¿Hay vida más allá de lo que puedo ver? ¿Por qué hay maldad y sufrimiento? ¿Cómo puedo encontrar la felicidad? Los jóvenes de diferentes épocas y lugares podrán expresarlos de manera diferente, pero con sus preguntas buscan entender las cosas importantes en la vida. Y hay algo más en común a los jóvenes de hoy: todos ellos tienen experiencia de la influencia de la secularización en diferentes grados.
«Dios sí, la Iglesia no»… ¿Sigue siendo una constante?
Los jóvenes en el mundo de hoy parecen tener aversión a cualquier autoridad en lo que concierne a nuestro pensamiento: «Yo tengo mi opinión, y tú puedes aferrarte a la tuya». Esta visión se refuerza cuando los representantes de la Iglesia adoptan una actitud impositiva, en lugar de una actitud de servicio. El Papa Francisco es un gran ejemplo de esta última postura, ¡y hay que ver qué grande es su autoridad moral en nuestro mundo contemporáneo! La gente no puede creer y llegar a la fe por obligación, sino que necesita ayuda para descubrir el amor de Dios por ellos y para reconocer la felicidad que la fe en Dios les puede dar. Todos estamos juntos en esto, y Jesús mismo fundó la Iglesia para ser una compañía amorosa, una comunidad viva y una fuente de sabiduría acerca de Dios.
¿Cómo acercarnos a los jóvenes entonces?
En el proyecto Tweeting with God evitamos expresiones como debes o deberías. Jesús no comienza por juzgar y condenar: comienza visitando a los pobres y curando a los enfermos, ya sea en su condición física o espiritual. Incluso se sienta a la mesa de pecadores bien conocidos. Jesús comienza donde se encuentran las personas. Él los visita y les habla sobre sus preocupaciones. Su principal herramienta para convencer a la gente es su amor por ellos. Eso es lo que le impulsa, y eso es lo que la gente encuentra tan atractivo en él. Y entonces, cuando se establece una relación, Jesús va más allá y explica todo lo que se exige para vivir la vida al máximo.
Hemos de comenzar donde la gente está, con sus preguntas, con sus dolencias, espirituales o físicas. Al testimoniar nuestra propia fe en Jesús, sin imponerla a los demás, demostramos cómo caminar con Jesús. En última instancia, la respuesta a las preguntas relacionadas con la fe no se encuentra en la lógica o en la autoridad de la Iglesia, sino en una persona: la persona de Jesús, que nos ama a cada uno de nosotros con un amor que no podemos verdaderamente imaginar.
Por eso es muy importante ayudar a la gente a conocer a Jesús antes de hablar de condiciones o mandamientos. ¿A quién le gustaría entrar en contacto de por vida con una persona desconocida, solo sobre la base de una lista de lo que hay que hacer y lo que no hay que hacer? Solo cuando esté creciendo en un vínculo personal con Jesús, la gente será capaz de aceptar las reglas de vida que da, sabiendo que esto les ayudará a ser verdaderamente felices.
Una curiosidad: ¿cómo son los tuits que manda Dios?
[Risas] El punto de Tweeting with God no es responder a las preguntas en nombre de Dios. Más bien, la idea es ayudar a las personas a comenzar a comunicarse, o tuitear con Dios. En este contexto, como en cada momento, la oración es esencial. Si quieres saber más acerca de tu fe, ¡conoce a Dios! Sobre la base de la búsqueda de Dios en la oración, uno comienza a ver la gran lógica de nuestra fe.