Según aseguraba Hannah Arendt, en un contexto diferente del actual, «quien quiera hoy hablar acerca de la política ha de comenzar con todos lo prejuicios que se tienen con ella». Es tiempo, por tanto, de hablar de la política, dado que estamos asistiendo a una mutación profunda de este ámbito que, por su naturaleza, pretende la hegemonía. Las transformaciones políticas, sean del tipo que sean, modifican tres núcleos esenciales: los sujetos, los temas y las condiciones. Los sujetos son los protagonistas de la acción política y, en no menor medida, también los que se dedican al pensamiento sobre la política. Los temas son aquellas cuestiones que se debaten o sobre las que se gobierna, la denominada agenda política. Y las condiciones son las circunstancias en las que se lleva a cabo la política, en tiempos que se aceleran los procesos y en espacios que se abren. Por ejemplo, las redes sociales que han alterado la forma de hacer política.
En este contexto, José Manuel Ortí Bordás, un hombre con una dilatada carrera política y de servicio al Estado, nos ofrece, en este ensayo, a modo de «descargo de conciencia», un lúcido diagnóstico de las patologías y mutaciones de la política actual. Cargado de una sana erudición, que se traduce en una abundante bibliografía citada, el autor parte de una minuciosa disección del fenómeno de la desafección, para después llevar al lector por una nueva geografía que se está configurando, la posdemocracia, y lo que tiene de antipolítica en el sentido clásico del término. ¿Qué es la desafección? Siguiendo a Rubio Carracedo, para un nutrido grupo de ciudadanos, la democracia es insustituible, aunque vivan en un estado psíquico de desentendimiento, a punto de caramelo de la alteración. Si continúan participando en los procesos electorales, lo hacen a pesar del sistema. Incluso dan un paso más y se dejan activar por mecanismos y formas antisistema, como los populismos. El ejemplo español es demasiado evidente. La desafección es un desamor acentuado y un tanto resentido que se prolonga en el tiempo. Los políticamente desafectos se caracterizan por la desinformación, la pasividad y el rechazo indiscriminado a partidos y dirigentes políticos.
Lo que hace Ortí Bordás es poner la lupa a la desafección por la política y a la sociedad española del presente, y detectar aquellas geografías de la desafección y las consecuencias en nuestros días. Una desafección que ha afectado no solo al orden democrático sino a la socialdemocracia y que tiene que ver con el espejismo del predominio del modo liberal-capitalista. Hay que destacar de este libro el análisis que, en las páginas centrales, hace del populismo. Un fenómeno que, en palabras de Kenneth M. Roberts, se caracteriza por un liderazgo personalista o paternalista, una heterogénea coalición de intereses de diversas clases sociales, una movilización que ignora los mediadores tradicionales, una ideología amorfa o ecléctica y un proyecto económico con política redistributiva o clientelar.
José Miguel Ortí Bordás
Ediciones Encuentro