El Papa convoca a los sindicatos para abordar conjuntamente los desafíos del trabajo
En este diálogo participarán los principales sindicatos del mundo, entre ellos CC. OO. y UGT. También participará la HOAC, junto con el obispo de Pastoral Obrera de la Conferencia Episcopal
Durante los días 23 y 24 de noviembre, en el Aula Nueva del Sínodo de la Ciudad del Vaticano, el Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral, del cardenal Peter Turkson, ha convocado el Encuentro Internacional de Organizaciones Sindical –histórico, pues no consta un precedente similar– con el lema De Populorum progressio a Laudato si’. El trabajo y el movimiento de los trabajadores en el centro del desarrollo humano integral, sostenible y solidario. ¿Por qué el mundo del trabajo sigue siendo la clave del desarrollo en el mundo global?». El Vaticano vuelve a poner el foco en el trabajo humano y en la dignidad de la persona.
La perspectiva del encuentro es muy significativa. De un lado, la Doctrina Social de la Iglesia en cuyos principios se inspira esta iniciativa, apuesta por «generar acuerdos que promuevan un desarrollo humano integral, sostenible y solidario». En la propuesta y documento preparatorio, se referencian las encíclicas: Populorum progressio, sobre el desarrollo de los pueblos; Sollicitudo rei socialis, sobre la preocupación social de la Iglesia, Laborem exercens, sobre el trabajo humano y Caritas in veritate, sobre el desarrollo humano integral y Laudato si’, sobre el cuidado de la casa común. La aportación de cinco papas ponen en valor la vigencia del pensamiento social de la Iglesia en relación con el trabajo y el desarrollo humano integral, sostenible y solidario.
El Papa Francisco llama a «descubrir un nuevo diálogo sobre el modo como estamos construyendo el futuro de nuestro planeta» que tenga en cuenta las dimensiones ambiental, económica, social, cultural y religiosa. «El mundo del trabajo es una prioridad humana. Por lo tanto, es una prioridad cristiana», manifestó recientemente en su asamblea en la fábrica de Ilva (Génova). Desde ese diálogo prioritario se pretende atender las problemáticas y desafíos del trabajo que, para la Iglesia, «sigue siendo la clave del desarrollo en el mundo global». Una constante irrenunciable en estos cuatro intensos años de pontificado, tal y como recoge de manera explícita la encíclica Laudato si’: situar el valor del trabajo como indispensable, irrenunciable e irremplazable para cubrir las necesidades de las personas y alcanzar una vida digna, una vida buena.
Francisco es particularmente insistente en la importancia del trabajo digno en la lucha contra la pobreza, una de las principales preocupaciones de su pontificado, expresado en: «¡Ah, cómo quisiera una Iglesia pobre y para los pobres!» priorizando la atención evangélica en las periferias, entre quienes sufren «la cultura del descarte».
El trabajo decente es el hilo conductor en sus recientes visitas pastorales; lo ha sido ante diversas instituciones y organizaciones; o en sus distintos mensajes. Lo ha sido, durante tres años consecutivos, mediante el diálogo mantenido en los tres encuentros mundiales de movimientos populares, «un signo de esperanza» –según sus propias palabras– para millones de trabajadoras y trabajadores «descartados» que luchan por «los derechos sagrados al Techo, al Trabajo y a la Tierra».
La convocatoria impulsada por Bergoglio está siendo bien recibida por las instituciones y entidades del mundo obrero y del trabajo. La OIT, inmersa en un diálogo global en torno a la iniciativa sobre el futuro del trabajo como respuesta a los desafíos en favor de la justicia social, participa a través de su director general, Guy Ryder.
La presencia de CC. OO. y UGT está confirmada con sus responsables de Internacional, Cristina Faciaben y Jesús Gallego, respectivamente –no la de USO al coincidir con su Congreso– para compartir acción sindical, experiencias y compromisos. El encuentro pretende, consecuentemente, animar a los sindicatos del mundo a seguir construyendo y mejorando una sociedad más fraterna, justa e inclusiva que situé «el trabajo humano en el centro y la clave del proceso de civilización».
Por otro lado, el Movimiento Mundial de Trabajadores Cristianos (MMTC), internacional a la que pertenece la Hermandad Obrera de Acción Católica (HOAC) estará representado por Fátima Almeida, copresidenta, y por el director de la revista Noticias Obreras, Abraham Canales, quien además atenderá comunicativamente esta cita.
Finalmente, por la Conferencia Episcopal Española (CEE) ha confirmado su participación el obispo responsable de la Pastoral Obrera, Monseñor Antonio Algora, emérito de Ciudad Real, y por Fernando Díaz Abajo, a su vez, consiliario general de la HOAC. La CEE tiene entre sus compromisos inmediatos abordar el quehacer de la Pastoral Obrera ante el futuro del trabajo.